¡Hola chicos y chicas! Con un poco de retraso -echadle la culpa a la Universidad de Valencia-, pero aquí os traigo una nueva reseña, en esta ocasión de una trilogía de la que seguro habréis oído hablar. ¡Espero que la disfrutéis!
Legado en los Huesos, Ofrenda a
la Tormenta)
Autor:
Mercedes Redondo
Editorial:
Destino
Género:
Policíaca
Formato:
Papel
(Del
Guardián Invisible)
«Ainhoa Elizasu fue la
segunda víctima del basajaun, aunque entonces la prensa todavía no lo llamaba
así. Fue un poco más tarde cuando trascendió que alrededor de los cadáveres
aparecían pelos de animal, restos de piel y rastros dudosamente humanos, unidos
a una especie de fúnebre ceremonia de purificación. Una fuerza maligna,
telúrica y ancestral parecía haber marcado los cuerpos de aquellas casi niñas
con la ropa rasgada, el vello púbico rasurado y las manos dispuestas en actitud
virginal.»
En los
márgenes del río Baztán, en el valle de Navarra, aparece el cuerpo desnudo de
una adolescente en unas circunstancias que lo ponen en relación con un
asesinato ocurrido en los alrededores un mes atrás.
La
inspectora de la sección de homicidios de la Policía Foral, Amaia Salazar, será
la encargada de dirigir una investigación que la llevará devuelta a Elizondo,
una pequeña población de donde es originaria y de la que ha tratado de huir
toda su vida. Enfrentada con las cada vez más complicadas derivaciones del caso
y con sus propios fantasmas familiares, la investigación de Amaia es una
carrera contrarreloj para dar con un asesino que puede mostrar el rostro más
aterrador de una realidad brutal al tiempo que convocar a los seres más
inquietantes de las leyendas del Norte.
Hacer la reseña de una
trilogía es algo peliagudo, si alguna vez habéis hecho alguna lo sabréis,
¿cuánto puedes decir sin que se considere spoiler? ¿Cuánto debes decir para que
se considere que estás reseñando toda la saga y no solo el primer volumen?
La Trilogía del Baztán
esa una trilogía policíaca que se centra en la zona del valle de Navarra y cuya
protagonista es Amaia Salazar Slytherin.
Como en la mayoría de sagas policíacas, en cada novela hay una serie de
crímenes relacionados que deben resolverse. Los asesinatos de todas las novelas
se relacionan en el último libro, como también suele ser habitual. Remarco que
no me importa que sea habitual, me gustan muchos las novelas policíacas, cuando
algo funciona no es necesario cambiarlo. Pero las novelas de Mercedes Redondo
sí tienen algo no tan habitual que roza lo original. Realidad y fantasía se
diluyen, malechores y seres mitológicos se entrelazan, eso es lo no tan
habitual, lo original: esos seres mitológicos son propios de la zona del valle
del Baztán y del País Vasco. También difiere de las típicas novelas policiacas
en que la protagonista es una mujer que a partes iguales badass, madre amantísima sufridora, mujer sexuada, jefa cabrona,
etc. ¡me encantan los personajes femeninos complejos! Aunque no me caiga
del todo bien. Y, como último apunte a la trama, llega un punto en el que es
tan importante las pistas y resolución de los crímenes como los misterios de la
familia de la Inspectora Salazar. Podríamos decir que Baztán evoluciona a una
saga policíaca-costumbrista.
Los personajes que
escribe Redondo tienen dos ramas, por norma general: los complejos, en su
mayoría mujeres, y una sucesión de clichés que abarca todos los posibles tipos
de hombre. Eso es una de las cosas que no me ha gustado. Entiendo que si la
mayoría de personajes importantes son mujeres estos deben estar mucho más
trabajados que los demás, pero hay un par de hombres, como James, el marido de
Amaia, Jonan, su compañero de trabajo más leal, o Dupree, que es
mejor que no sepáis nada de él, que creo que deberían de haber tenido más
fondo, ya que por lo menos en el caso de James, llega un punto en el que parece
más una parodia de hombre florero –y utilizo esta expresión que odio a falta de
encontrar otra mejor– que otra cosa. Esa es una de las razones por las que no
me cae del todo bien Amaia, por cómo trata a James en ciertas ocasiones. Y, el
personaje más importante de todos, el valle. La ambientación de las novelas es
de lejos lo mejor de todo.
Por último para acabar
la reseña, la escritura de Redondo es sencilla pero, en mi caso me costó
pillarle el punto, en ocasiones da saltos de una escena a otra que te hacen
perderte, pero en el momento en el que pasas de ese shock inicial, consigue
engancharte y arrastrarte página por página por toda la trilogía.
Creo que es una saga
que merece la pena, con una ambientación espectacular, un misticismo y un
tiente ambiental que me robaron el corazón, misterio en justa medida y algunos
personajes para recordar. No me gustó cómo resuelve el final del tercer libro,
así como el tema de los personajes masculinos y un par de cositas más que
prefiero no contar para no fastidiaron la trama, pero se lo dejo pasar por todo
lo demás.
¿Habíais oído hablar de esta trilogía? ¡A que las portadas son preciosas!
Nos leemos.
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