Hoy os traemos la reseña de una saga llamada "El sujeto nº 1" y, aunque sabemos que según la encuesta que hicimos preferís que hagamos las reseñas libro por libro, esta la teníamos en proceso antes de que la encuesta acabara. Además, la reseña está hecha por dos personas (Laura y Beatriz) así que esperamos que os aclaréis cuando hablamos según la opinión de la una o de la otra.
Y, ahora sí, os dejamos con la reseña ^.^
Saga: El sujeto
nº 1
Título Original: El
sujeto nº 1, La agencia
Autor: Paula
Sáez
Editorial:
Viceversa
Género: Ciencia
Ficción – Romántica – Young Adult
Año: 2010, 2011
Formato: Rústica
¿Cómo te sentirías si vieras la fecha de caducidad de las personas que
te rodean?
Ser extraordinario no siempre es deseable. Laura Sanz es una brillante
y solitaria estudiante de veinticuatro años, marcada desde su infancia por un
secreto que la ha llevado a huir de las personas a las que quiere. Cuando es
elegida como ayudante de Monsieur
Leblanc, responsable en la ONU de velar por los derechos de la infancia en
conflictos armados, Laura no imagina que el pasado que había enterrado volverá
a aparecer y la llevará a conocer a varias personas con habilidades fuera de lo
común.
En un peligrosa y emocionante aventura, Laura deberá enfrentarse a una
organización secreta, a unos misteriosos personas y a sus propios miedos para
obtener, al fin, respuestas sobre el sujeto nº 1.
De acuerdo, la reseña referente a la primera parte de la saga me ha
costado (Laura) mucho de escribir (y esto es así). Encontré este libro
una tarde que estaba de compras con mi madre pero no tuve la suerte de
comprarlo aquel día. Aunque una parte de mí se arrepiente de no haberlo hecho,
otra está feliz porque así tuve la oportunidad de que fuera la propia Paula la
que, al año siguiente, en la feria del libro de Valencia, me contara de qué iba
el libro. Ahí sí me lo compré. Y aún recuerdo la cara que puso cuando al ir a
dedicarme el libro le dije que me llamaba Laura; como la protagonista. Fue un
recuerdo que jamás olvidaré. Pero centrémonos en el libro.
Empecemos primero por los personajes, ya que casi todos son comunes en
ambos libros. En la primera parte conocemos a muchos: Laura, Leblanc, Matt,
Zach, Axel, Karoli, Luz, Tyler, Haruka y Riko (las gemelas) y Becca; entre
otros muchos. Y en la segunda se les añade también Olen, Bert y Medth, por
nombrar a algunos.
Está claro que Laura es la protagonista y creo que en ciertos momentos
me siento identificada con ella. Huye de un pasado doloroso y por eso se
encierra muchas veces en sí misma. Pero también es fuerte. Mucho. Creo que a
causa de ese dolor que ha padecido en su pasado, es más fuerte de lo que ella
muchas veces cree. Prueba de ello es todo lo que consigue una vez entra en La
Agencia. Y, además, también es como una madre con los niños de la casa.
Desprende tanta dulzura con los niños que es enternecedor. Pienso que eso es
porque ella tuvo una infancia difícil y aunque sea inconscientemente no quiere
que los demás pasen por ello (aunque muchos de ellos hayan pasado por cosas
peores también). Intenta darles el cariño que a muchos (por no decir a
todos) les ha faltado. Pero aquí también está el problema. Ella misma es
una contradicción: porque los quiere, pero a la vez no quiere hacerles daño. A
causa de sus fechas de caducidad cree que las personas lo único que pueden
darle es dolor; y ella a los demás también. La comprendo, no creo que pudiera
soportar el dolor de conocer la fecha de la muerte de mi hermana, o mi madre.
Sería simplemente insoportable. Así que entiendo que muchas veces se muestre
vulnerable, afligida por ese pasado del que huye. Pero cuando conoce a Leblanc
en la ONU, se le presenta un futuro muy, muy brillante. La máxima importancia
que creo que tiene Leblanc aquí, a parte de ser un canal indirecto con la
acción que transcurre después, es el hecho de representar una figura paterna
para Laura cuando ésta más lo necesita. Creo que por eso es importante; y por
eso, a pesar que el personaje no sea protagonista, me gusta.
“Encontré la respuesta a la pregunta que siempre me había planteado: cómo eran los abrazos de verdad, y cómo sería recibir uno de un padre.”
Luego está también Matt. Es una de esas personas que la ves y dices que
brillan. Desprende despreocupación por los poros de su piel, vive la vida sin
importarle (aparentemente) gran cosa, es seguro de sí mismo; digamos que
pisa la acera como diciendo “Hey, soy
Matt. Estoy aquí”. Así que, personalmente, eso me encanta. Pero también
tiene algo, una espinita, que le atormenta. Y es que Matt nació con una
alteración en sus terminales nerviosas que le causa una insensibilidad al
dolor, por tanto no siente nada: ni dolor, ni calor, ni frío. Lo cual es
peligroso para él; pero su cuerpo se ha encargado de suplir sus necesidades. Lo
que también me encanta de él (para qué mentir. Me encanta todo él. TODO) es que
es como un hermano mayor para los niños de La Agencia. Su mayor miedo es que
ellos sí sientan el dolor que él no puede. Y, sobre todo, es tierno. De verdad,
es un amor.
“El miedo nos ciega. Especialmente el que sentimos ante lo desconocido y lo inexplicable. Nos hace olvidar el amor que sentimos por los demás. Lo bueno de nuestras vidas.”
Otro personaje es Zach. Él es nuestro médico y también se encarga de
cuidar a los niños que viven en la casa como si fueran sus propios hijos; lo
cual resulta enternecedor teniendo en cuenta que su infancia tampoco fue
demasiado fácil. Ha tenido que vivir una guerra en su propia casa dado que su
padre se pasaba más tiempo trabajando que estando con él. Así que decidió
seguir los pasos de su abuelo. Él es otro de nuestros enlaces para las dos “partes” de la historia (y hasta aquí
puedo leer porque estaría haciéndoos spoiler). A pesar de ser un personaje
enternecedor, dedicado a su trabajo y a sus niños, no ha logrado captar mi
atención como Matt lo ha hecho. Pero aún así, es un buen personaje.
Por último están los niños de La Agencia. Ellos son, cada uno a su
medida y forma, excepcionales. Son increíbles y no sólo por lo que saben hacer.
Muchos han sobrevivido a más cosas de las que algunos de nosotros tendremos que
sobrevivir en toda nuestra vida y aún así, no sé si es por ser jóvenes aún o
qué, siguen con ganas de vivir la vida; de disfrutar de las pequeñas cosas. Y
eso me encanta, porque dentro de tanto complot y tanta intriga y de saber quién
es el malo y qué va a pasar a continuación, es como un momento de relax. Las escenas
con ellos son, relajantes, como un descanso a la vez que te sirve para ir
descubriendo también otras cosas de la trama.
“¿Hasta qué punto estaba bien robarle la vida así a alguien? Un niño no podía decidir libremente algo tan importante, ni si quiera un niño tan especial como aquél.”
Pero si alguno de los niños tiene mi especial atención, ese es Axel.
Matt puede que me haya robado el corazón, pero él es mi debilidad. Y no puedo
explicaros el por qué, porque ni yo misma lo sé. Pero así es. Creo que, en
cierta forma, Axel es el que más sufre porque aunque los demás perciban las
emociones de la gente que le rodea, este joven alemán las siente en carne
propia. Las risas para él son como cosquillas, sí; pero el sufrimiento de otra
persona le da dolor de estómago. Y creo que eso es bastante difícil de aislar,
por decirlo de alguna forma, para que pueda estar con la gente. Pero como le
dice a Laura en el libro, no se da por vencido porque no quiere aislarse de la
gente. Quiere vivir una vida normal, dentro de lo humanamente posible. Así que
creo que por eso, además de por otras muchas cosas, se merece mi admiración.
“Hay muchas injusticias en el mundo, pero las que se cometen contra los niños son las peores.”
Respecto a El sujeto nº 1, ya
hemos dejado caer muchas cosas al hablar de los personajes, pero me (Laura)
gustaría destacar el final, en el epílogo, cuando Laura parece que le esté
contando esa escena a otra persona, creo que por lo que ocurre y por la forma
en la que está escrita, hace de ella una de mis escenas favoritas por lo
enternecedora que es a la vez de lo simple (y no. No es simple en plan…mal).
Sin embargo, si hay que encontrarle algo negativo al primer libro es
que al principio, al igual que hemos leído en alguna que otra reseña, sí que
sentimos que el amor entre Matt y Laura nace como…muy deprisa. No se siente casi
real. Pero después de leer varias veces el libro hemos llegado a comprender que
aunque por un lado pueda parecer así, hay que tener en cuenta que ellos tienen
una mente más desarrollada, procesan todo de forma más rápida. Así que quizás,
quien sabe, puede que en la vida real sí que pudiera llegar a suceder de esa
forma.
En cuanto a La Agencia, no
podemos decir mucho sin desvelar el final de la primera parte, pero es un libro
con mucha más acción que El sujeto nº 1.
Empezamos a conocer el pasado de la Agencia y cómo fue construida y también la
historia del primer sujeto que entró en ella. Es por esto que los títulos de
los libros deberían estar cambiados, es decir, el primero llamarse La Agencia y
el segundo El sujeto nº 1. Si hay un momento que destacaría (Beatriz) en este
libro es una carta que aparece casi al final y que tiene un contenido muy
emotivo. También una escena muy divertida relacionada con un helicóptero y
donde se dejan caer comentarios referentes al vuelo de Perdidos y sobre qué personaje del Equipo A le correspondería a cada uno de los presentes. El libro
tiene un final cerrado, pero se presta a imaginar una continuación según los
gustos de cada uno: ¿consiguen un final feliz merecidísimo o tienen que seguir
luchando? Es vuestra elección, pero nosotras ya tenemos claro nuestro final.
Lo que más nos gusta de estos libros es que consiguen que algo
fantástico como puede ser ver las fechas de caducidad de las personas, predecir
sus movimientos, ver el “aura” u otras cosas que los personajes de este libro
hacen, tengan una base científica. Creo que eso es una de las mejores partes de
los libros. Porque la autora podría, simplemente, darlo como un hecho y no
encontrarle explicación. Pero no, la busca…y termina encontrándola.
También nos gusta que son libros fáciles de leer, amenos, divertidos a
la par que intrigantes y fascinantes. Te los lees en una sentada. La escritura
no entorpece el ritmo de lectura y, además, tampoco es un tipo de escritura
pomposa o rimbombante. Igualmente, cautiva que se intercalen distintas personas
gramaticales. En las escenas en las que Laura está presente, es ella misma
quien nos las narra. Pero si no, un narrador omnisciente es el encargado de
hacerlo.
Así que por todo lo comentado, es una saga que nos gusta y que a mí
(Laura) personalmente me encanta; cada vez que tengo un rato libre lo cojo para
leerlo, si no todo algunas partes. Y sinceramente, creemos que es además de un
buen libro, una lección de lo que es la familia, el amor; y además nos enseña a
valorar qué seríamos capaces de hacer por la gente que amamos.
Saga recomendada. Recomendadísima. No creemos que os defraude.
“Los que no saben de dónde vienen están más perdidos que los que no saben adónde van.”
“Porque sabía que, para encontrar la luz, primero hay que conocer la oscuridad…”
“¿Cómo se manipula a una persona? ¿Cómo se cambian sus recuerdos, su historia, su forma de ser? ¿Cómo se transforman las verdades en mentiras?”
“—Si algo nos duele, es porque nos importa. El dolor nos recuerda lo que hemos vivido y deja en nosotros marcas para aprender en un futuro.”
¿Qué os parece? ¿La habéis leído u os llama la atención? Comentadnos, sabéis que nos gusta saber vuestra opinión.
No voy a leer la reseña porque POR FIN voy a leerme los dos libros ¡Que ganas! Cuando termine el primero ya os dejo comentario por aquí diciendo que me ha parecido, pero tiene muy buena pinta :)
ResponderEliminaren que pagina sale esta frase?
ResponderEliminar“—Si algo nos duele, es porque nos importa. El dolor nos recuerda lo que hemos vivido y deja en nosotros marcas para aprender en un futuro.”