Reseña "Sueños de dioses y monstruos"

¡Buenas!

Espero que hayáis tenido una vuelta a las clases menos movidita que la mía, que hasta ahora no había tenido tiempo de subir la reseña de esta semana (aquí en España son casi las 12 de la noche).

Hoy os traigo la última parte de la trilogía Hija de humo y hueso (podéis leer las dos primeras partes aquí y aquí). Así que, si ya os habéis paseado por Eretz con Karou y Akiva, no os podéis perder esta reseña; eso sí, contiene spoilers de los libros anteriores.

Título: Sueños de dioses y monstruos (Dreams of gods and monsters)

Saga: Hija de humo y hueso

Autor: Laini Taylor

Editorial: Alfaguara

Género: Fantasía

Año: 2014

ISBN: 9788420417776

Formato: ebook

Nº Páginas: 616

Un enemigo común, una causa común

Karou y Akiva ya saben que están vivos... pero Karou aún no está preparada para perdonar.

Y ahora, mediante un terrible engaño, Karou ha tomado el control sobre la rebelión quimérica y el futuro de su raza depende de ella, si es que aún queda futuro para las quimeras en Eretz, una tierra devastada por la guerra.

Cuando el brutal ejército de serafines de Jael penetra en el mundo humano, lo impensable se convierte en esencial: Karou y Akiva tendrán que unir sus ejércitos para luchar contra un enemigo común.

Esta unión de ambos ejércitos es una versión alterada de su antiguo sueño, donde ángeles y quimeras conviven juntos, en paz. Donde hay esperanza para su imperdonable amor entre ángel y demonio.

Pero sobre Eretz se ciernen mayores amenazas que Jael. Una cruel reina va a la caza de Akiva y en los cielos está ocurriendo algo. Gigantescas manchas se extienden como moratones de un lado a otro del horizonte. Los cazadores alados de tormentas se congregan como si hubiesen sido convocados, volando en círculos sin cesar, y un profundo sentido de injusticia impregna el mundo. ¿Qué clase de poder puede herir el cielo?

Desde las calles de Roma hasta las cuevas de los Kirins, humanos, quimeras y serafines lucharán, amarán y morirán en un teatro épico que trascenderá el bien y el mal, la amistad y el odio.

Y, más allá de las fronteras del espacio y el tiempo, ¿qué sueñan dioses y monstruos? ¿Y acaso alguna otra cosa importa?

No veía la hora de que el libro saliera en español para poder leerlo y saber, por fin, cómo terminaba la historia de los serafines y las quimeras. Porque, aunque el libro se centre más en la historia de Karou y Akiva, los protagonistas son todas las quimeras y los Ilegítimos que deben aprender a tolerarse para poder vencer a un enemigo común.

“Las personas con un destino no deberían hacer planes.”

La autora me sigue encantando con su forma de escribir, sabiendo alternar entre momentos de tensión con otros con algún toque de humor para aligerar el ambiente. Su forma de escribir, ágil y amena, hace que te sumerjas en la lectura y que sea muy fácil dejarse llevar por la historia. Además, sabe mantener el misterio hasta el final, dando las pinceladas justas para que sigas deseando leer sin parar.

Me gustaría destacar algo que me ha gustado mucho, no sólo en este libro si no también en los anteriores, y son las frases que pone la autora para diferenciar cada una de las partes en las que se divide el libro. Son preciosas y siempre están relacionadas con lo que sucede en esa parte.

“Érase una vez un ángel y un demonio que se llevaron la mano al corazón y desencadenaron el apocalipsis.”

Los personajes siguen evolucionando desde los anteriores libros. Podemos ver como los acontecimientos hacen mella en muchos de los protagonistas, pero también como tratan de superarlo y sobreponerse a ello. La dificultad que supone intentar que dos enemigos ancestrales se unan para luchar contra una causa común, como es necesario que todo el mundo ponga un poco de su parte para tratar de salvar las diferencias y, que con un poco de esfuerzo, puede lograrse. Queda muy bien reflejada la respuesta que tiene la gente cuando los serafines se presentan en la Tierra ¿cuántas veces habéis visto que un ejército de ángeles se plante en la Plaza de San Pedro?

En este último libro se pueden conocer personajes nuevos, tanto unos que parecen no ser parte de la trama como otros que están relacionados con los personajes ya conocidos, permitiendo que se conozcan más cosas sobre su pasado. Además, a pesar de haber muerto en el segundo libro, Hazael está muy presente gracias a los recuerdos de Liraz y Akiva, quienes tienen que lidiar con su muerte y tratar de superarla cada uno a su manera.

"<Cualquiera que se meta con mi hermana, tendrá que vérselas… con mi hermana>, y luego se había escondido detrás de ella, acobardado."

La parte de la historia que permite llegar al final del libro mantiene constantemente un ritmo tenso, que hace que no puedas dejar de leer hasta que todo se solucione, de alguna manera o de otra. Hay que destacar que la autora sabe jugar muy bien con las emociones de la gente y mientras leía los últimos capítulos varias veces pensé que me daría un ataque al corazón y que yo sola podría inundar el Titanic.

Respecto al final, a mí me ha gustado. Creo que es una conclusión coherente con lo que va sucediendo a lo largo de la trilogía (excepto con dos personas que no termina de cuadrarme), pero aún así no me podría haber imaginado un final mejor. Sin embargo, la autora lo deja un poco abierto; así que, a aquellas personas que les guste que todo quede bien atado y sin ningún cabo suelto, a lo mejor no termina de parecerles bien.

"Las cosas cambian. Pueden ser cambiadas por aquellos que tengan voluntad.Incluso los mundos. Quizá."

En resumen, si os gustan las historias de fantasía, con algo de misterio y un poco de amor; con personajes entrañables y carismáticos y otros odiosos a más no poder, que van evolucionando a lo largo de la trama; con una historia muy entretenida y bien desarrollada; y una forma de escribir ágil, coloquial y que sabe mantener el punto de tensión en los momentos clave; esta es vuestra trilogía. Hija de humo y hueso está totalmente recomendada.

"Uno bovino, pensó Karou. Serás una enorme y lenta vaca. Y a la siguiente mirada que Lisseth le lanzó, pensó, casi alegremente, muuuu."

"- Las bestias… vienen a por vosotros."

"- Tu maestra es la vida o la muerte."

"De ninguna manera Liraz iba a acercarse para calentar al apiñado grupo con sus alas. Sus ardientes, hermosas y calentitas alas."

"- ¿Qué pasa? – preguntó Liraz –. ¿Por qué te ríes?

- Porque la vida es una bastarda – fue todo lo que Akiva pudo responder.

- Bien – fue la categórica respuesta de su hermana–, entonces supongo que encajamos perfectamente en ella."

"Hermanos, que serviciales a la hora de hacer demostraciones mortíferas."

"- Tengo suerte de estar viva – anunció –. Cuando era pequeña, le chupaba los ojos a un pato."

Y en los agradecimientos, la autora escribía lo siguiente:

"También sigo esperando a que Razgut me enseñe un portal. Porque obviamente Eretz existe. ¿Cómo, creíais que me lo había inventado todo?"

Laini Taylor nació en 1971 en Chico, California. Como hija de un marine, vivió en muchos lugares diferentes mientras crecía: Hawaii, Italia, Bélgica, Virginia y California; por esto, habla un poco de francés y de italiano. Siempre quiso ser escritora por lo que estudió inglés en la Universidad de Berkeley.

En el 2004, escribió una novela gráfica The Drowned, ilustrada por su marido Jim Di Bartolo. En 2007 y 2009, se publicaron los dos libros pertenecientes a la saga Dreamdark: Blackbringer y Silksinger, respectivamente. Éste último libro ganó en 2009 el Cybil Award. En 2011, empezó a publicar su trilogía Hija de humo y hueso, cuya primera parte homónima fue elegida por Amazon como el mejor libro juvenil de 2011. Un año después, 2012, se publicó la segunda parte de la saga y dos años después, la  conclusión de la trilogía.

*Información extraída de la página web de la autora y de wikipedia

Y hasta aquí la reseña. ¿Os lo habéis leído o habéis empezado la trilogía? ¿Cuál es vuestra opinión? Nos encanta leer vuestros comentarios, lo sabéis ^.^

¡¡Saludos!!